Poema para enamorados

Poema para enamorados

En el paraíso de tus ojos,
me pierdo porque estoy perdido,
en la paz de tus labios,
me encuentro porque estoy contigo,
en el universo de tu alma,
vivo con mil sentidos,
en ti, amándote.

Poema para enamorados
Hoy os dejo este poema para enamorados o para enamorar a una persona que quieres que este a tu lado, espero que os sirva, porque nunca se sabe lo que podrá pasar.

Espero que tengáis suerte y consigáis vuestros objetivos con la persona que deseáis tener a vuestro lado día a día.

Poeta español José Zorrilla

Primera impresión de granada

Dejadme que embebido y estático respire
Las auras de este ameno y espléndido pensil.
Dejadme que perdido bajo su sombra gire;
Dejadme entre los brazos del Dauro y del Genil.
Dejadme en esta alfombra mullida de verdura,
Cercado de este ambiente de aromas y fresura,
Al borde de estas fuentes de tazas de marfil.
Dejadme en este alcázar labrado con encajes,
Debajo de este cielo de límpidos celajes,
Encima de estas torres ganadas a Boabdil.

Dejadme de Granada en medio del paraíso
Do el alma siento henchida de poesía ya:
Dejadme hasta que llegue mi término preciso
Y un canto digno de ella la entonaré quizá.
Si, quiero en esta tierra mi lápida mortuoria;
¡Granada!... Tú el santuario de la española gloria:
Tu sierra es blanca tienda que el pabellón te da,
Tus muros son el cerco de un gran jarrón de flores,
Tu vega un chal morisco bordado de colores,
Tus torres son palmeras en que prendido está.

¡Salve, oh ciudad en donde el alba nace
Y donde el sol poniente se reclina:
Donde la niebla en perlas se deshace
Y las perlas en plata cristalina:
Donde la gloria entre laureles yace
Y cuya inmensa antorcha te ilumina;
Santuario del honor, de la fe escudo,
Sacrosanta ciudad, yo te saludo!

Primera impresión de granada

Gran poeta español llamado José zorrilla y moral, nacido en Valladolid ( España ) el día 21 de Febrero del 1817, Falleció en Madrid el 23 de Enero de 1893 a los 75 años de edad.

Se hizo famoso dando recitales públicos y obtuvo numerosos honores entre los que sobresalen su nombramiento de cronista de Valladolid (1884) y su coronación como poeta nacional de Granada (1889).